Productores de Sinaloa enfrentan incertidumbre por políticas agrícolas, advierte Sergio Esquer
CULIACÁN._ La agricultura en Sinaloa enfrenta hoy condiciones de incertidumbre y desventaja frente a productores de otros países, debido a políticas públicas poco claras y a la desaparición de esquemas de comercialización y cobertura, señaló Sergio Esquer Peiro, director general del Grupo Chaparral.
En su exposición en el foro “El futuro de Sinaloa: ¿hacia dónde y cómo?”, el también ex presidente de la Asociación de Agricultores del Río Culiacán subrayó que la actual falta de certeza sobre precios y mercados afecta directamente la confianza de los productores locales.
“Hoy sembramos sin saber a cuánto y a quién le vamos a dar; esa incertidumbre destruye confianza y nos pone en desventaja frente a productores de otros países que reciben apoyo del Estado”, criticó.
“Se consumen 47.6 millones de toneladas, de las cuales 19.6 millones son de maíz blanco y 28 millones de maíz amarillo. México importaba 17 millones de toneladas; para 2025 se proyectan 25 millones. Esto demuestra que retrocedimos sin que existan políticas que protejan a los productores locales”.
Esquer Peiro señaló que los agricultores sinaloenses han tenido que competir sin un marco de apoyo comparable al de Estados Unidos, donde la planificación agrícola incluye subsidios y leyes actualizadas cada cinco años.
En ese sentido, el empresario enfatizó que los alimentos no son una mercancía más, sino un asunto de seguridad nacional, estabilidad social y soberanía.
“Un país que depende de otros para comer se vuelve vulnerable frente a la crisis económica. Además, garantizar precios accesibles se asocia a empleos y competitividad”, afirmó.

Otro de los problemas que mencionó es el manejo del agua. Explicó que Sinaloa es uno de los estados que más consume agua a nivel nacional, pero carece de un registro ordenado y supervisión adecuada.
Esto, manifestó, complica la planificación de cultivos y limita la eficiencia de la infraestructura agrícola existente, afectando tanto la productividad como la rentabilidad de los productores.
El empresario hizo un llamado al Gobierno federal y a la Cámara de Diputados para definir qué productos se quieren priorizar y en qué cantidades, con estrategias que den certeza a los productores y recuperen la confianza en el campo sinaloense.
“No pedimos privilegios, pedimos piso parejo para competir en igualdad de condiciones”, concluyó.