Científico escuinapense, Cristhian Valerio, presentará conferencia en la Universidad Tecnológica de Escuinapa
La comunidad de la Universidad Tecnológica de Escuinapa se prepara para recibir, el viernes 26 de septiembre de 2025, al Dr. Cristhian Alfonso Valerio Lizárraga, científico escuinapense quien impartirá la conferencia “Aceleradores de partículas: explorando el universo y mejorando nuestra vida” a estudiantes de Mecatrónica y Mantenimiento, a las 10:30 horas en la biblioteca universitaria.
El Dr. Valerio Lizárraga participó recientemente en el diseño de la fuente de partículas que utiliza el Gran Colisionador de Hadrones en el CERN, el laboratorio de física de partículas más grande del mundo que opera la Organización Europea para la Investigación Nuclear, en la frontera entre Suiza y Francia.
Es profesor investigador de la Facultad de Ciencias Físico-Matemáticas de la UAS, recién instalado en Culiacán tras su estancia en Suiza. Su labor se centra en la física de aceleradores y el electromagnetismo, tanto en el ámbito teórico como experimental. Ha desarrollado proyectos de investigación en colaboración con laboratorios internacionales como CERN y Jefferson Lab, y trabaja activamente en la formación de estudiantes de licenciatura y posgrado, así como en la aplicación de tecnologías basadas en aceleradores para la ciencia, la industria y la sociedad.
El CERN y los aceleradores de partículas
La Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN, sigla que corresponde a su antiguo nombre en francés: Conseil Européen pour la Recherche Nucléaire) se ubica cerca de Ginebra, Suiza; se integra por 23 estados y más de 600 instituciones académicas y de investigación en física para ayudar a descubrir de qué está hecho el universo y cómo funciona.
Los aceleradores de partículas son máquinas que aceleran protones, electrones o iones a velocidades extremadamente altas. Son esenciales, entre muchas aplicaciones, en la producción de sustancias utilizadas en diagnóstico médico por imagen, como en los escáneres PET, que permiten detectar enfermedades como el cáncer en etapas muy tempranas. En la industria facilitan la producción de semiconductores y modificación de materiales; incluso, permiten analizar vestigios arqueológicos, obras de arte y objetos antiguos sin dañarlos.
