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Herencia

Reparten herencia de Silvia Pinal, equivalente a 200 millones de pesos

La distribución de la herencia se realizó entre sus tres hijos, Sylvia Pasquel, Alejandra y Luis Enrique Guzmán, recibiendo 36 millones de pesos cada uno, también fueron contempladas sus nietas y bisnietas
24/08/2025 09:36

Luego de que trascendiera que Silvia Pinal murió sin dinero, finalmente se aclaró la situación financiera que dejó la primera actriz al momento de su fallecimiento.

Aunque circularon versiones de que no tenía capital, se confirmó que sí contaba con recursos en sus cuentas bancarias, por lo que su herencia asciende a 200 millones de pesos.

De acuerdo con la información revelada en Ventaneando, la distribución del herencia de Silvia Pinal ya fue desglosada. Sus tres hijos, Sylvia Pasquel, Alejandra y Luis Enrique Guzmán, recibieron 36 millones de pesos cada uno.

Mientras que Stephanie Salas obtuvo 18 millones; Michelle Salas y Camila Valero (hijas de esta última) recibieron 9 millones cada una; y Frida Sofía, hija de Alejandra Guzmán, también recibió 18 millones.

Asimismo, se informó que Schersa y Giordana Guzmán, hijas de Luis Enrique Guzmán, fueron incluidas como beneficiarias, obteniendo 18 millones de pesos cada una. Estos datos desmienten la idea de que la diva del cine mexicano hubiera dejado a sus herederos sin respaldo económico, señala quien.com

Previo a dar a conocer cómo se repartió la herencia de Silvia Pinal, María Elena Galindo, quien fungía como administradora de los bienes de la gran diva del cine mexicano tras la muerte de la productora Tina Galindo, confirmó que renunció al cargo, y así lo explicó al programa encabezado por Pati Chapoy.

“Creo que Alejandra se va a hacer cargo de la albacea. No sé si el notario o el juez les dé permiso. Pero yo ya, la verdad, ya no puedo. Ya estoy grande”. De esta manera, todo apunta a que será la cantante de 57 años quien asuma esta responsabilidad.

Silvia Pinal, considerada la última diva de la Época de Oro del cine mexicano, falleció el 28 de noviembre de 2024. Su muerte marcó el final de una era en la cultura y el entretenimiento de México, al dejar no solo un legado artístico inigualable, sino también un patrimonio considerable para sus descendientes.