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Festejos aniversario 50 Difocur-Isic

Reconoce la Banda Sinfónica Juvenil a sus fundadores en emotivo concierto

El espectáculo evocó a sus primeros directores y sus primeros días de gloria como primera banda juvenil del país
19/05/2025 18:22

Una de las jornadas más emotivas dentro del programa de festejos del 50º Aniversario de la fundación de la Dirección de Investigación y Fomento de Cultura Regional (Difocur, hoy Isic), protagonizó la Banda Sinfónica Juvenil del Estado, fundada en 1976, al ofrecer un concierto conmemorativo con la participación y presencia de sus miembros actuales y fundadores, a quienes se entregaron reconocimientos en un ambiente de reencuentro y de recuerdos.

En el intermedio del concierto, la entrega de diplomas fue presidida por Rodolfo Arriaga Robles, director de Programación Artística del Instituto Sinaloense de Cultura; Claudia Apodaca Elenes, directora de Formación y Capacitación; Diego Rojas, director del Sistema Estatal de Fomento Musical, y Eduardo Ríos Obeso, uno de los fundadores, como conductor.

“Aquí tenemos a un conjunto de hombres que han hecho posible la construcción de una institución; cuántos integrantes de la OSSLA, nuestra máxima organización musical, han pertenecido a la Banda; aquí veo a varios. La banda es un semillero que le da continuidad a esta maravilla que es la música”, señaló Arriaga Robles, a nombre de la institución.

Agregó que “en aquellos tiempos no existían casi bandas sinfónicas en México y esta fue una de las pioneras, y por eso tenemos mucho que agradecer a los que se fueron, igual que a los que aún están entre nosotros, y larga vida a la Banda Juvenil y a sus fundadores”.

Eduardo Ríos Obeso hizo subir al escenario a cada uno de los fundadores de la Banda de Música Infantil y Juvenil, pero antes hizo un breve repaso de los logros del conjunto en aquellos primeros años, desde 1976, que se creó bajo la guía del maestro José Sebastián Dionicio Limón, director fundador, (qepd), con el apoyo de sus colaboradores Alejandro Minjarez Osuna (qepd), Atilano Serrano Valenzuela (qepd) y Manuel “Chino” Flores Gastélum (qepd).

Señaló que, aunque dio conciertos desde los primeros meses, fue en 1977 cuando ofreció su concierto inaugural, ante las autoridades del gobierno de Alfonso G. Calderón, tocando en todos sus actos cívicos, en desfiles conmemorativos, en el Carnaval de Mazatlán, en giras en el estado y en el programa Siempre en Domingo, en un homenaje nacional a Cri Cri, así como en intercambios culturales con Texas, USA, y Francia.

Estuvo presente en la inauguración del Centro Cultural Genaro Estrada, con constantes conciertos en el ágora, en el teatro y en la Sala Lumière (hoy Teatro Socorro Astol), ya bajo la batuta del maestro Efraín Ernesto Esperilla García. Fue la primera banda infantil y juvenil en México y quizás en Latinoamérica, con 77 integrantes reclutados en secundarias de la localidad.

En 1979 grabó un disco, cuyas piezas se retomaron en el Concierto Conmemorativo de este domingo, y con un sonido muy al estilo de las bandas militares de aquel tiempo, con arreglos del maestro Chino Flores a música sinaloense y mexicana, y abre con el corrido Los caballos que corrieron, que era la canción que le tocaban al gobernador Calderón Velarde.

En la entrega de reconocimientos, tuvo el suyo el maestro Baltazar Hernández Cano, actual director de la BSJE de la que ha estado al frente por 27 años, tiempo en el que ha formado a numerosas generaciones de músicos, y digno heredero de la labor iniciada por sus predecesores.

El concierto abrió con Los Caballos que corrieron, Potpourrí Sinaloense y Antojitos mexicanos, con piezas de moda en aquellos años como Pajarillo barranqueño, Allá en el rancho grande, Déjame llorar, El mariachi de mi tierra y Guadalajara, todas con arreglos de Chino Flores.

La segunda parte abrió con Fiesta del Bohemio (Obertura), de Alberto Escobedo; esta, bajo la dirección de Martín Alejandro Ramírez Flores, miembro fundador y quien dirigió por mucho tiempo la banda infantil y juvenil de Hermosillo, Sonora. También con el arreglo de Chino Flores.

Luego, Poeta y Campesino, de Franz von Suppé; Las Bodas de Fígaro, de Wolfgang A. Mozart, y cerró con La Gitana (Obertura), del dominio público, con arreglo de Chino Flores.