Llevan a escena ‘Don Giovanni’, una ópera de tragedia y comedia
Considerada como una de las grandes obras maestras del genio de Salzburgo y de la historia de la música y de la cultura occidental, se presentó con éxito en el Teatro Ángela Peralta la ópera Don Giovanni.
El público disfrutó la obra dirigida por Ragnar Conde, que muestra un equilibrio perfecto entre tragedia y comedia, en el máximo recinto porteño que lució lleno.
Don Giovanni, un casanova que ha acumulado miles de conquistas con mujeres de cualquier edad o estrato social en diferentes países, comienza su ocaso como burlador en la recámara de Donna Anna, quien al parecer desprecia sus encantos y grita por ayuda logrando que acuda su padre, El comendador, para retarlo a duelo y morir tras un corto enfrentamiento.
De ahí se desencadena la jocosa trama de una de las óperas de Wolfgang Amadeus Mozart más gustadas y llevadas a escena en todo el mundo, una historia que contempla dos actos, el primero el castigo al seductor y el segundo su descenso al infierno.
La ópera buffa que presentó una adaptación contemporánea, pero originalmente clasificada como cómica y melodrama, fue del total agrado de los presentes que rieron con las escenas un tanto dramatizadas.
También disfrutaron el ensamble que se visualizó sobre el escenario, integrado por cantantes de diferentes partes del mundo, la Camerata Mazatlán y la Compañía de Danza Contemporánea Delfos.
El bajo-barítono Esteban Baltazar dio vida a Don Giovanni, un jocoso protagonista, astuto y frívolo, que dentro de su esencia siempre fue en busca de la libertad.
Las acciones de cada uno de los personajes en conjunto expresaron la complejidad de las relaciones humanas, aún citadas en el Siglo 21.
