|
Proceso

Modelo anterior dio corrupción y nepotismo, elección judicial es oportunidad de cambio: Mónica Güicho

Nuevo mecanismo para elegir a personas juzgadoras refuerza la obligación de que el Poder Judicial responda a las demandas sociales de los grupos más vulnerables y proteja los derechos humanos de la ciudadanía, afirma candidata a Ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación
27/05/2025 11:35

El Poder Judicial, bajo el anterior modelo de integración, ha sido un espacio copado por la corrupción, conflicto de intereses y el nepotismo, por lo que las votaciones del próximo 1 de junio en las que la ciudadanía escoja a las personas juzgadoras es una oportunidad para lograr un cambio, señaló Mónica Arcelia Güicho González.

La candidata a Ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación apuntó que con la participación ciudadana en la jornada electoral, los altos cargos del Poder Judicial sean ocupados por personas que cumplan con los requisitos legales y que no estén ligados a alguna red de nepotismo.

”El anterior modelo creaba un fuerte conflicto de interés que profundizó, en este flagelo de nuestro País denominado corrupción, ¿y qué otra cosa ocurrió? Pues con el ámbito de atribuciones, de esta facultad graciosa del Ejecutivo por 200 años, pues se arraigó el nepotismo”, aseveró.

”Es la gran oportunidad para que esta ciudadanía, que exige este cambio constitucional, el pueblo mexicano impulse el cambio constitucional, pues lo más lógico es que ahora lleguen esos perfiles que se señalan en la Constitución”.

”En función de los perfiles que la ciudadanía haya elegido. Porque resulta que la Constitución es tan clara y que ahora quiere personas impartidoras de justicia profesionales, altamente capacitados, con técnica jurídica y experiencia en la función. Y también que cuenten con el requisito de honorabilidad y buena fama pública”, aseguró Mónica Güicho.

Indicó que con el arraigo del nepotismo y corrupción dentro del sistema judicial mexicano, se ha limitado el progreso para perfiles profesionales.

”La verdadera carrera judicial tiene un techo de acero, porque las personas operadoras de justicia no pueden acceder a los altos cargos. Esto abrió una gran oportunidad para que muchas mujeres y varones en la impartición de justicia se motivaran”, dijo la candidata.

Señaló que el nuevo mecanismo para elegir a personas juzgadoras refuerza la obligación de que el Poder Judicial responda a las demandas sociales de los grupos más vulnerables y proteja los derechos humanos de la ciudadanía.

En ese sentido, refirió que la población se siente distanciada de las autoridades judiciales en la búsqueda por proteger sus derechos e intereses sociales.

”Es uno de los pilares más importantes que concede la Constitución, la protección de los derechos humanos. Hacerlo efectivo es el reto, y en eso se tiene que pronunciar ya la Suprema Corte de Justicia de la Nación”.

”Son justamente las causas de desventaja socioeconómica lo que les impide tener una debida defensa, entonces no tienen garantizado el acceso a la justicia, no tienen garantizado el derecho fundamental de tutela efectiva”, subrayó Güicho González.

Advirtió que este proceso electoral, el primero en torno a los cargos del Poder Judicial, presenta debilidades como los tiempos cortos para que las candidaturas se den a conocer a la ciudadanía, o la posible intromisión de los partidos políticos en la contienda.

Aunado a ello, expuso, los propios participantes de la elección carecen de certezas legales, ya que hay algunas reglas y lineamientos que se establecen en el transcurso de la elección.

”Ese riesgo está identificado, practicarlo resulta en una violación del más alto grado, que es una violación constitucional en nuestro sistema jurídico”.

”Es un juego en el que se da inicio a la contienda y las reglas se siguen estableciendo durante el juego. Esto tiene esta debilidad, tiene que cambiar, no puede ser así, porque es contrario a la certidumbre, que es un principio del Estado de Derecho”, reclamó la candidata a Ministra, Mónica Güicho.