Da Festival del Raspado ‘respiro económico’ a comerciantes de Imala
CULIACÁN._ La segunda edición del Festival del Raspado en la sindicatura de Imala dio un ‘respiro económico’ a comerciantes que han visto menguar sus negocios tras el estallido de la crisis de seguridad.
La comunidad al norte de Culiacán, fuera de la mancha urbana, fue visitada por centenas de ciclistas y motociclistas convocados por el Ayuntamiento durante la mañana de este domingo 31 de agosto.
Los ciclistas partieron a las 6:00 horas desde el zoológico de Culiacán resguardados por elementos de la Guardia Nacional, la Policía Municipal, Tránsito y la Policía Estatal.
Posteriormente una centena de motociclistas fueron acompañados por los agentes hacia el festival.
Además de un turibus lleno de pasajeros, quien también arribó acompañado de una patrulla municipal.
“Gracias a Dios sí se reportó la gente. Si acudió al llamado de las autoridades al evento. Queríamos hacer un evento anteriormente y pues la gente no acudió.
“A lo mejor [los eventos organizados por gobierno] son un respiro económico pero tal cual la solución a lo mejor no. Pero ayuda a que la gente vea que poco a poco se puede ir regresando a la normalidad que teníamos”, subrayó Humberto, vendedor local de raspados.
En el centro de la sindicatura el Municipio incentivo eventos deportivos entre los visitantes y al menos 10 vendedores de raspados abrieron sus puertas.
En el kiosko, una grupo musical de la Universidad Autónoma de Sinaloa tocaba canciones de rock y pop.
Humberto destacó que durante la semana acuden hasta 50 turistas a consumir lo que se vende en el pueblo.
Para la comerciante Dariana, los eventos que conglomeran a decenas de personas en un mismo sitio son parte de la solución para rescatar a la comunidad, ya que esto genera confianza colectiva.
“La gente se anima a venir más porque hay eventos donde la gente se puede reunir más. Pienso que el que venga más gente le da un poco más de seguridad a la gente es como: ‘ah, pues va más gente, pues voy a ir’... Se siente más confiada la gente si vienen en conjunto”, apuntó.
“¿La diferencia entre hoy y otros días? Si es mucha, porque anteriormente porque anteriormente, te podría decir hace tres domingos sí había habido gente pero no como ahora”, explicó.
Detalló que la situación de incertidumbre lo llevó a disminuir la inversión en su negocio con el fin de protegerse de pérdidas.
A diferencia de Rosario, quien destinó hasta 15 mil pesos para surtir su negocio.
“Uno se prepara porque este evento estuvo muy bien el año pasado y nos aseguraron que hoy también, no hemos vendido tanto así. Hemos vendido pero no igual”, subrayó.
“En parte sí [es la solución traer eventos] porque ellos [autoridades municipales] están promoviendo todo lo de la ruta segura que es lo más importante para la gente”, expresó.
Este evento surgió en 2024 con el propósito de impulsar el turismo hacia el pueblo señorial y dar a conocer su gastronomía. Para su segunda edición, más que una promoción, se ha convertido en una necesidad para los comercios locales, que han resentido afectaciones económicas por la disminución de visitantes tras el estallido de la violencia del crimen organizado que se ha extendido hasta las cercanías de esta comunidad.